Vendiendo confusión…

Con autorización de Seth Godin.

Durante las últimas décadas, ha habido una campaña consistente sembrando confusión acerca de la evolución, las vacunas y el cambio climático.

En las tres áreas todos tenemos acceso a muchos más datos, mucha más certidumbre y cantidades ilimitadas de pruebas de que las teorías originales se han sostenido. Los datos son más precisos que nunca. La evolución es la mejor manera de explicar y predecir el origen y cambio de las especies. Las vacunas no son la causa del autismo y salvan millones de vidas de niños (y de sus Padres). Y el mundo está, de hecho, calentándose peligrosamente.

Y aun así…

Encuesta tras encuesta en muchas partes del mundo muestran que la gente se equivoca o niega flagrantemente las tres. A diferencia de la cada vez más asintomática consistencia de las explicaciones científicas, los negadores tienen una lista infinita de razones para su confusión, muchas de las cuales se contradicen entre sí. La confusión no necesita ser verdad para confundir.

Es de notar que esta respuesta no sucede alrededor de cosas que son mucho más complicadas o científicamente controversiales (como la gravedad o la materia oscura). Es la combinación del impacto visceral y la cohesión tribal lo que dirige el deseo de negar.

Las compañías cigarreras estuvieron entre los primeros negadores (aseguraban que los cigarros no estaban relacionados con el cáncer de pulmón, pero no les funcionó bien la estrategia), y mucho de su guía de confusión está siendo usada en estos nuevos temas.

¿Con qué fin? La confusión puede ayudar a algunas industrias en causas de corto plazo, pero, ¿Hacia dónde lleva? El trabajar para convertir hechos en asuntos políticos no los hace menos reales para nada.

Si esta creciente masa «gana», ¿Que obtienen? En un mundo post-ciencia, donde la física y los hechos probables siempre están abiertos para la opinión del hombre común en el momento, ¿Como mejoran las cosas? ¿Cómo se desarrolla un nuevo antibiótico sin entender la especiación y resistencia de las enfermedades?

Sé que el punto de vista de la ciencia nos llega de lleno si prevalece, si la evolución es enseñada en las escuelas, si las vacunas se vuelven más seguras y populares, si los gobiernos y las corporaciones empiezan a sensibilizarse y prepararse para el cambio climático mundial.

Lo que es un misterio es lo que obtendrán los confusores anti-ciencia si prevalecen. ¿Qué sucede cuando no criemos a la próxima generación de científicos, cuando las vacunas se vuelvan política y económicamente insostenibles, cuando cerremos los ojos y simplemente reconstruyamos casas en los cauces de los arroyos de nuevo? A la gravedad no le importa si crees en ella, ni al cáncer de pulmón.

Pregúntale a un confusor esto la próxima vez que ofrezca una pantalla de humo de corto plazo: Si esta es una carrera para ver quien es el más desinformado, y el más pasivo, ¿Qué pasa si ganas?