Hay una cosa que separa a los exitosos de la gente promedio.
El mayor enfureció: «¡¿De que hablas?!» gritó.
El anciano se sentó y con calma y le dijo.
“Tranquilo, necesito que hagas algo. ¿Podrías revisar en la granja de enfrente si tienen ganado en venta?»
El hijo mayor fue y regresó rápidamente, “Si Padre, tienen 6 vacas en venta.”
El Padre le agradeció y después volteó con el hijo menor y le pidió lo mismo y con las mismas palabras: «¿Podrías revisar en la granja de enfrente si tienen ganado en venta?»
El hijo menor se fue y tardó más tiempo en regresar con la respuesta, “Padre, tienen 6 vacas en venta. Cada vaca cuesta 2,000 monedas. Si nos comprometemos a comprarle más puede reducir cada una en 100 monedas. También me dijo que la semana entrante le va a llegar ganado de mejor calidad y que si no tenemos prisa nos recomienda esperar. Sin embargo en caso de que tengamos urgencia puede arreglar que nos las traigan antes.»
El Padre agradeció al hijo menor y volteo con el mayor: “Esa es la razón por la que voy a heredar la granja a tu hermano menor.”
La Gente con Éxito tiene Iniciativa
La mayoría solo hace lo que le indican, lo mínimo requerido. Necesitan instrucciones específicas en la mayor parte de sus tareas.
Opuestamente, aquellos que logran el éxito se comprometen a detalle en lo que hacen. No necesitan ser empujados o administrados en todo. No solo hacen el trabajo, lo hacen bien y completo. También influyen en la dirección del flujo de ideas y proyectos.
Pero lo más importante, aquellos que logran el éxito tienen iniciativa. Buscan a la gente, hacen preguntas, dan recomendaciones, ofrecen su ayuda y venden sus ideas.
Ser exitoso requiere ser proactivo y no esperar a que la vida venga a rescatarte. Significa estar a la ofensiva, no a la defensiva. Activo, no pasivo.
En cada organización, hay algunos empleados selectos que son difíciles de reemplazar. La mayoría son como el hijo mayor del granjero. Probablemente fáciles de reemplazar. Pasivos y reactivos. Requieren instrucciones específicas. Necesitan que los gobiernen y administren en todo.
El tener iniciativa tiene siempre algún grado de riesgo. Te estás exponiendo y hay posibilidad de que falles.
Por otro lado, hacer solo lo que te indican no implica riesgo ni acarrea responsabilidades adicionales. Es jugarla seguro.
Conclusión
¿Eres alguien con iniciativa? Por supuesto que puedes serlo.
Si no, algo es seguro: La vida no te va a rescatar.
Rafa Elorduy 