Sé que mucho para el que la recibe pero, ¿Qué valor tiene para tí?
Todos sabemos lo que es una contribución normal. Es la que sucede cuando una persona calificada hace el trabajo, de acuerdo a las especificaciones y cumple una promesa.
Pero la contribución extraordinaria es difícil de encontrar. Es cuando sorprendemos al sistema, y tal vez a nosotros mismos, exhibiendo algo inesperado, más allá del estándar común. La contribución extraordinaria crea carreras. Es romper a través del estatus quo, un cambio en una dinámica de poder previamente aceptada.
La contribución extraordinaria cambia no solamente al que la recibe, sino al que la aporta también.
De modo que si, tiene bastante valor. La oportunidad de presentarse en una cocina profesional (y generosa) no tiene precio. El trabajo de becario o de verano donde no descansas en ponerte al nivel, mostrándole al mundo y a ti mismo de lo que eres capaz–eso vale mucho mas que el dinero que gastaste endeudándote en la Universidad.
La parte difícil no es trabajar gratis, sino darte cuenta de que esta es tu oportunidad de hacer más de lo que se te pide, de resistir el no recibir pago de una organización tan pobre como para pagarte apropiadamente. En lugar de ello, este es un momento especial para saltar.
Rafa Elorduy 