Preséntate.
Preséntate y sigue presentándote.
Preséntate con al menos el mismo entusiasmo que tenías cuando levantaste la mano como voluntario al principio.
La parte voluntaria es fácil. Hacer promesas es una manera divertida de jalar la atención de alguien.
Mantener esas promesas a veces se olvida, pero así es como construyes algo.