Todo software está sujetado con parches, atajos y basurita.
(Muchas casas viejas también).
No te sorprendas. Esperalo.
En algún momento, necesitarás respirar hondo y pagar un buen de dinero para empezar de nuevo. Y entonces, al siguiente día habrá clips de papel y alambres acumulándose de nuevo.
Así es como funciona. Y de milagro dí que funciona.
(De hecho la arquitectura, el diseño, los ejes de nuestra cultura–son un proceso en evolución, con telarañas, repavimentaciones, reparaciones, baches y mejoras. Nos gustaría creer en algo perfecto y reluciente, pero es rarísimo de hecho. Incluso tu teléfono inteligente tiene una red de aplicaciones sin usarse y desperfectos a evitar.)