Con drama. Asegurate de que el cliente sepa que tan duro estás trabajando, a que extremos estas yendo para servir. Haz un alboroto por esa petición especial, el costo adicional, el sudor y las lágrimas.
Sin drama. Haz que parezca sin esfuerzo.
Cualquiera puede funcionar. Depende del cliente y la situación.
Pero es una elección. Podemos tomarla con intención.