En resumidas cuentas esas son las únicas opciones.
Ser juzgado es incómodo. Juicios rápidos, prejuicios, desinformación… todo esto, combinado con falta de tiempo para que te conozcan realmente, significa que inevitablemente serás mal juzgado, subestimado (o sobre estimado) y rechazado injustamente.
La alternativa, por supuesto, es mucho más segura y cómoda. Ser ignorado.
Es tu decisión.
PD Cada minuto que pasas sin que intentes dar el salto es mucho más cómodo y seguirás siendo ignorado en tu zona de confort y seguridad. No es justo, yo te ayudo a salir de ahí. Nos vemos en http://rafaelorduy.com para que te suscribas gratis o hablemos por supuesto…