Hay que gente que, cada vez que se comprometen con otros, tienen un drenado de energía. Necesitan la persuasión, las palmaditas en la espalda y el entusiasmo para seguir adelante, y requieren cada vez mas para continuar.
Y otras personas son una llave de agua; una tubería infinita de posibilidades, potencial y movimiento hacia adelante.
¿Con quién trabajas? ¿A quién estás contratando?
Es posible convertir un drenaje en una llave. Mas que nada es una elección, una decisión para bailar con el miedo de la contribución al objetivo común.
PD ¿Eres llave o drenaje? Todos debemos ser lo primero. Platiquemos de como podemos hacerlo en rafaelorduy.com